La educación como punta de lanza, una perspectiva de desarrollo sustentable para la juventud y los apoyos a las MiPymes pueden ser una base para que la economía dominicana siga despuntando tras los estragos de la pandemia del Covid-19.
Durante el panel «La visión del liderazgo empresarial joven ante los retos de la reactivación económica», tres de los seleccionados en el Ranking 40 Under 40 de la Revista Mercado, compartieron sus perspectivas con relación al tema.
Por un lado, Christian Cabral, VP Corporativo de Grupo Martí (#5 en el ranking), señaló que es importante mantener a la educación como uno de los ejes principales para el crecimiento del país, el presupuesto destinado por el gobierno (4 por ciento del PIB) debe encaminarse en tres niveles: corto, mediano y largo plazo.
Dentro del corto, destacó la promoción de una educación técnica para personas que no se encuentren activas. Así comienzan a introducirse en el mundo laboral y puede haber oportunidad para que en un mediano plazo se preparen de una mejor manera e impulsar las industrias en las que se desempeñan.
Por último, y lo más difícil para el VP Corporativo de Grupo Martí, es el largo plazo en donde se debe canalizar de una manera correcta el rumbo a seguir para la economía del país.
Es importante este punto, ya que según cifras de la Oficina Nacional de Estadística (ONE), la población dominicana es considerada joven, ya que el 60.63 por ciento se encuentra en edades de 0 a 34 año, lo que supone una oportunidad para fijar las bases de acción.
Más de la mitad de la población de República Dominicana es joven y estará en sus manos el desarrollo del país en el futuro.
Para Amalia Vega Peynado, VP de Comunicación, RSE & Relaciones Institucionales en CCN (#28 en el Ranking), las personas quieren ver organizaciones que tengan proyectos más allá de ganar dinero y desean sumarse a esos proyectos.
«Nosotros respondimos -particularmente desde el sector empresarial- con una unidad que se basa en los principios de responsabilidad social ¿Cómo la empresa responde a situaciones para mejorar su entorno, su medio ambiente, o la situación a la que se esté enfrentando en el momento?», indicó Amalia Vega.
Como resultado de la pandemia, las empresas se enfrentan a un conjunto cada vez más complejo de presiones y demandas de sus consumidores, incluido su compromiso social y su perspectiva hacia el futuro.
Si el Covid-19 nos ha mostrado algo es la importancia de todos y cada uno en la capacidad de una empresa para funcionar y prosperar.
Los líderes empresariales seguirán enfrentando una mayor presión para incorporar soluciones y el mensaje correcto, especialmente las de los empleados, en su supervisión y toma de decisiones.
En el caso de un modelo económico viable y con oportunidades para la población, José Nelton González (#11 en el Ranking), VP Ejecutivo en ERC, sugirió que el apoyo a los pequeños y medianos comercios (MiPymes) darán la capacidad para que sean empresas sólidas en el futuro.
«Debemos buscar que muchos de los emprendimientos se conviertan en empresas formales. Es necesario que el gobierno se involucre para que sea más fácil emprender y competir en los diversos sectores productivos y de negocios», señaló.
En el periodo de 2014-2018 se lograron cumplir sólo el 30 por ciento de los objetivos relacionados con los apoyos de MiPymes.
El ejecutivo señaló la importancia que tiene este rubro para la economía, ya que el 98 por ciento del tejido productivo nacional proviene de este sector, que además aporta el 34 por ciento del PIB anual.
En materia de empleos, los pequeños y medianos negocios emplean a cerca de 2 millones de personas en todo el país y representan el 54 por ciento de la población laboral.
Por lo que resulta muy necesario fortalecer el ecosistema de emprendimiento y apoyar a las MiPymes para que se puedan convertir en empresas competitivas en el futuro.
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