LAS EMPRESAS siguen sumándose a la lucha contra el covid-19 y la sucursal de Cervecería Heineken en México, donará al país el hielo seco necesario para mantener las vacunas de Pfizer a -70 grados centígrados, que es la temperatura estimada para su transportación.
La compañía estará haciendo la concesión de 50 toneladas de hielo carbónico, para mitigar un poco los inconvenientes en el proceso de traslado de la vacuna. Especialmente en territorios como el de México que es tan extenso y además tiene variaciones de clima.
“Estos momentos difíciles requieren la solidaridad y el esfuerzo de todos. Para nosotros la salud y la vida es lo más importante. Con esta acción nos sumamos a los esfuerzos de nuestras autoridades, quienes dieron un gran paso al traer la vacuna e iniciar la aplicación entre los sectores más vulnerables”, afirmó Etienne Strijp, director General de Heineken México.
No pudo haber un mejor sector para colaborar con este ingrediente tan importante, como una cervecería. El dióxido de carbono es el elemento principal dentro de la fabricación del hielo seco y también el más importante para elaborar las cervezas. Resultado del proceso de fermentación, se captura y se utiliza en la carbonatación de dicha bebida.
De hecho, la empresa ha instalado máquinas especializadas para la producción de hielo carbónico. En este caso las placas de enfriamiento se producen a partir del CO2, más comúnmente conocido como ‘hielo seco’ que es la forma sólida de dióxido de carbono, que se usa como agente refrigerante, ofreciendo la ventaja de generar temperaturas más bajas que el hielo común.
