Cuatro culpables del colapso de los negocios familiares

Por revistamercado | noviembre 25, 2020

Las luchas por poder y control pueden afectar a los negocios familiares, al igual que a cualquier otra compañía. A menudo hay cuatro problemas que son culpables del colapso de los negocios familiares:

— FALTA DE CONFIANZA: Solo sobreviven en la segunda generación. Esto significa que, en 70 % de las empresas familiares, la familia pierde control de los activos, y las relaciones quedan potencialmente destruidas. La falta de confianza y comunicación es responsable de esa tasa de fracasos.

— FALTA DE UN PROPÓSITO COMPARTIDO: Aunque los miembros de diferentes generaciones de la familia podrían tener distintos valores, un propósito compartido puede ayudar a los empleados a alinear sus valores e intereses en apoyo a una misión común.

— MAL MANEJO DE LOS CONFLICTOS: Los negocios familiares pueden hundirse por muchas razones, incluyendo conflictos acerca del dinero, mala administración y peleas acerca de la sucesión de poder de una generación a la siguiente.

— HIPOCRESÍA CORDIAL: Muy a menudo los miembros de la familia evitan temas difíciles al evadir las conversaciones significativas. Sin embargo, al no atenderse, las tensiones pueden incrementar la desconfianza y obstruir el desempeño en sus organizaciones. Entonces, ¿cómo pueden los directivos aplicar esta información a sus propios negocios familiares? He aquí algunas sugerencias:

— CONSTRUIR CONFIANZA EN FORMAS CONCRETAS: Los miembros de la familia deben prometer solo aquello que pueden cumplir, basándose en su nivel de competencia. Esto facilita el ejecutar planes y alcanzar metas.

— INCULCAR EL PROPÓSITO COMPARTIDO: Los líderes deberían declarar orgullosamente lo que hace la firma, a quién sirve y cómo los empleados pueden contribuir con sus pasiones y habilidades para ayudar a la compañía a tener éxito. Los líderes efectivos ejemplifican sus valores y cumplen lo que prometen a sus clientes, empleados y partes interesadas.

— ESTABLECER PROTOCOLOS DE COMUNICACIÓN CONSTRUCTIVOS: Cada miembro de la familia involucrado en el negocio debería aprender a dar retroalimentación, coordinar acciones y participar en conversaciones difíciles. Los miembros de la familia deberían ver los desacuerdos como oportunidades para encontrar la mejor forma de alcanzar sus metas.

— DESARROLLAR PROCESOS INCLUSIVOS DE TOMA DE DECISIONES: La toma de decisiones debería tomar en cuenta la dinámica familiar y las prioridades empresariales. Para minimizar la fricción, recomendamos un enfoque de abajo hacia arriba: los líderes deberían darle a cada miembro de la familia la autonomía para aplicar sus habilidades y pasiones a la misión familiar.

Los frutos de alentar un propósito compartido, la confianza mutua y la toma colectiva de decisiones son convincentes. Alinear en forma efectiva el poder y las dinámicas de la familia impulsa el desempeño del negocio, fortalece las relaciones y les brinda a las compañías los medios para ser una fuerza más efectiva que impacte positivamente en la sociedad. (Por Amy Castoro, presidenta y CEO del Williams Group, y renamiento para familias, y Fred Krawchuk es instructor familiar y consultor en el Williams Group.)