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SAMANTHA VALLEJO-NÁGERA
CHEF/INFLUENCER GASTRONÓMICA
ES LA chef más mediática de la Península Ibérica. Salió del anonimato de una firma de catering sin especiales atributos, al estrellato con la versión española de Master Chef, la franquicia televisiva que enfrenta a jóvenes artistas de la cocina, donde uno de ellos obtenga la supremacía, luego de una competencia que parece más una guerra que una prueba culinaria. Ahora, Samantha Vallejo-Nágera reescribe las reglas de la cocina.[/vc_column_text][/vc_column][vc_column width=»1/2″][vc_single_image image=»43110″ img_size=»full» alignment=»center»][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_column_text]Con los restaurantes de su país cerrados y sin actividades a las cuales suplir de catering, profundizó en una línea que tenía años cultivando, la actividad de influencer en redes sociales y YouTube, donde sube cápsulas de recetas fáciles y no tan fáciles que deslumbran a dos millones de personas a la semana. Incluso, esta agradable y multifacética cocinera se ha ganado el corazón de cientos de miles de anglosajones y eslavos por medio de sus vídeos subtitulados, puesto que combina su pasión por el buen comer con reclamos de un mundo más justo. La sede de su empresa se ubica en la localidad madrileña de Alcobendas. Son cuatro naves, con 50 empleados y 10 furgonetas. Los enlaces se han convertido en la especialidad de su compañía, que desarrolla en dos espacios en dos fincas una en Pedraza (Segovia) y otra en Guadalajara. Aunque pronto voló sola, todo empezó de mano de su familia. Comiendo con ellos en el restaurante Horcher, su dueño la retó y le dijo que no resistiría un día trabajando en sus cocinas.
Aceptó el reto y Samantha se presentó poco después ante Carlos Horcher con un uniforme que ella misma se compró, y pasó dos años aprendiendo las bases de la cocina tradicional. Descubrió así su vocación. De ahí a Londres y a Nueva York, donde repartió paellas en patines. En 1995 regresó a Europa donde terminó de formarse, primero en Lyon con el prestigioso chef francés Paul Bocuse y después con Juan Mari Arzak.[/vc_column_text][vc_column_text]Con los restaurantes de su país cerrados y sin actividades a las cuales suplir de catering, profundizó en una línea que tenía años cultivando, la actividad de influencer en redes sociales y YouTube, donde sube cápsulas de recetas fáciles y no tan fáciles que deslumbran a dos millones de personas a la semana. Incluso, esta agradable y multifacética cocinera se ha ganado el corazón de cientos de miles de anglosajones y eslavos por medio de sus vídeos subtitulados, puesto que combina su pasión por el buen comer con reclamos de un mundo más justo. La sede de su empresa se ubica en la localidad madrileña de Alcobendas. Son cuatro naves, con 50 empleados y 10 furgonetas. Los enlaces se han convertido en la especialidad de su compañía, que desarrolla en dos espacios en dos fincas una en Pedraza (Segovia) y otra en Guadalajara. Aunque pronto voló sola, todo empezó de mano de su familia. Comiendo con ellos en el restaurante Horcher, su dueño la retó y le dijo que no resistiría un día trabajando en sus cocinas.
Aceptó el reto y Samantha se presentó poco después ante Carlos Horcher con un uniforme que ella misma se compró, y pasó dos años aprendiendo las bases de la cocina tradicional. Descubrió así su vocación. De ahí a Londres y a Nueva York, donde repartió paellas en patines. En 1995 regresó a Europa donde terminó de formarse, primero en Lyon con el prestigioso chef francés Paul Bocuse y después con Juan Mari Arzak.[/vc_column_text][vc_column_text]Finalmente, montó su empresa de catering. Es la historia de una mujer emprendedora en un mundo dominado por los hombres. Tras el éxito en MasterChef, Vallejo- Nágera ha escrito seis libros. En uno de ellos, Samantha y Roscón, ha contado con el tercero de sus cuatro hijos, Patrick (a quien llaman familiarmente Roscón porque nació el día de Reyes), que tiene síndrome de Down, es un ejemplo de integración en el mundo de la hostelería.
El otro gran mercado que domina como pocos chefs es el digital. Vallejo- Nágera acumula medio millón de seguidores en su cuenta de Instagram y casi 120,000 en Twitter. La empresaria ha sabido rentabilizar el tirón que tiene en redes sociales y es reclamo de multitud de marcas. No ha quedado exenta de alguna polémica, como cuando promocionó una firma de hamburguesas como comida sana junto a una nutricionista. Tras las críticas se retiró la campaña. Ahora tiene su propio gabinete de comunicación que gestiona la relación de su imagen con las marcas y con la prensa. La imagen generalizada ofrece la impresión de que una sola persona lo hace todo, pero lo cierto es que ella se apoya en los suyos y se siente orgullosa de eso. Su madre, la francesa Sabine Déroulède, es su mano derecha. La señora es paisajista de amplia vocación y formación artística, por lo que es ideal para asesorar en materia de estética de los platos y los sets en el estudio.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_column_text]Suscríbete a la revista y regístrate a nuestros newsletters para recibir el mejor contenido en tu buzón de entrada.
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