Previo a la pandemia, Grupo SID había iniciado un proyecto de crecimiento agresivo, donde el rol de Jordi Portet, VP Corporativo de Finanzas, fue dar acompañamiento al plan estratégico, en condiciones ingenuamente previsibles.
Grupo SID contaba con un esquema estructurado, con planes definidos en cuanto a qué mercados, categorías y regiones iban a atacar para comenzar el despliegue de recursos. Pero la historia tomó un curso diferente: «llegó la pandemia y, de repente, ese horizonte de planificación y de acción se fue al día a día».
«Vivíamos en una incertidumbre y el rol del CFO fue ser parte de un equipo para entender qué pasara y después asegurar que, como organización, teníamos los recursos para subsistir, ver qué iniciativas había que empujar, pero todo se volvió en el día a día».
Jordi Portet agrega que esta situación los llevó a impulsar iniciativas importantes de transformación digital hacia finales del 2020, «cuando ya habíamos controlado la pandemia, como país, como nación, como mundo».
Con este impulso, en 2021 se realizó un proyecto de transformación digital dentro de todo el grupo.
«Se contrató a una firma externa, se hizo un diagnóstico y se trabajó una hoja de ruta para empujar grandes proyectos de transformación digital», precisó.
El primero de esos proyectos se enfocó en compras; el segundo tiene que ver con un concepto de planificación autónoma.
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