Se ha comprobado la efectividad de un sistema de inteligencia artificial (IA) para realizar diagnósticos precoces de casos de depresión. El estudio fue divulgado por investigadores de la Universidad de Stanford. Para su objetivo, aprovecharon tecnologías presentes en los teléfonos móviles como el reconocimiento facial y de voz e informes de programación.
El sistema utilizado fue alimentado con conversaciones en video a 200 personas, algunas de ellas con diagnóstico de depresión. Estas entrevistas fueron realizadas por un avatar interactivo, el cual era controlado por un médico.
Esta tecnología podría implementarse en los teléfonos celulares de todo el mundo y facilitar el acceso universal a la salud mental de bajo costo, dijeron los investigadores.
Para realizar sus diagnósticos, la tecnología en cuestión analizó diversos patrones como expresiones del rostro, tonos de voz y fluidez en el habla. Según apuntan los investigadores de Stanford, la inteligencia artificial tuvo un acierto superior al 80% en sus diagnósticos de depresión.
La investigación atraviesa una etapa temprana y quedan todavía muchos pasos por dar. Aún así, los expertos dicen que tecnologías de este tipo puedan funcionar en cualquier teléfono móvil para detectar estos trastornos, siempre como complemento y no reemplazo del conocimiento de los médicos.
«El peso de la salud mental está agravado por las dificultades en la atención, los estigmas sociales, los altos costos y la falta de opciones de tratamientos accesibles. Esta tecnología podría implementarse en los teléfonos celulares de todo el mundo y facilitar el acceso universal a la salud mental de bajo costo», señalaron los investigadores.
De acuerdo al especialista, resta por saber si este sistema será en algún momento 100% automático, considerando que el mencionado avatar que interactuó con los pacientes era controlado por un médico de carne y hueso.
