¿Necesitas un buen masaje? No solo sirve para relajarse

Por [email protected] | junio 20, 2022

El masaje es una de las herramientas terapéuticas más antiguas que existen. Realizado por un especialista, genera efectos no solo a nivel físico, sino también a nivel general. Los lugares que suelen requerirlo mayormente son las zonas del cuello, la espalda y la cintura. El estrés y los nervios repercuten especialmente en las dos primeras zonas. La cintura, por su parte, se ve más afectada por malos movimientos o por cargar pesos inadecuados.

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Los masajes benefician tanto a la piel, como a los músculos. Pero no sólo eso. Un buen masaje también ayuda a:

  • El aparato digestivo.
  • El sistema nervioso.
  • El sistema respiratorio.
  • La producción y normalización de hormonas.
  • El estado de ánimo.

Cuidar el momento

No se necesita una preparación especial para recibir un masaje, aunque sí es importante, además de los conocimientos del masajista, cuidar el contexto. El lugar debe ser tranquilo, con luz tenue y ambiente climatizado. Una sesión puede durar entre 10 y 90 minutos, según el tipo y el tiempo disponible. Debes sentirte sereno y relajado durante y después de la terapia, y es ideal respirar con normalidad a lo largo de todo el masaje.

A pesar de estos múltiples beneficios, hay ocasiones en las que los masajes pueden resultar contraproducentes. Es el caso de inflamaciones e infecciones agudas y subagudas, traumatismos recientes, fracturas no consolidadas o inflamaciones de la cavidad abdominal.

Cuatro tipos de masaje que debes conocer

  1. Masaje sueco: es una forma de masaje suave en la que se emplean movimientos largos, circulares, profundos, vibraciones y golpeteos. Ayuda a que te sientas relajado y energizado.
  2. Masaje profundo: esta técnica usa movimientos lentos y más fuertes para llegar a las capas más profundas del músculo y el tejido conectivo. Se utiliza normalmente para ayudar a mejorar el daño muscular por lesiones.
  3. Masaje deportivo: es similar al sueco, pero está dirigido a las personas que practican actividades deportivas. Su objetivo es ayudar a prevenir o tratar lesiones.
  4. Masaje de punto desencadenante del dolor: este masaje se centra en las partes sensibles de fibras musculares tensas que pueden formarse en los músculos después de una lesión o de un uso excesivo. (Celeste Pérez)

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