«If there is a will, there is a way» suele decir cuando existe una verdadera y genuina voluntad de acometer una misión. En este caso se trata de la muy difícil tarea de hacer llegar a las asediadas y castigadas ciudades de Ucrania una liquidez con la que mantener el pulso vital.
Hacerlo a través de alquileres fantasmas en la plataforma de Airbnb está siendo la peculiar iniciativa que han elegido miles de personas para ayudar económicamente a un país en guerra tras la invasión Rusa. A través de redes sociales se produjo un llamamiento para reservar pisos de ciudadanos ucranianos a través del gigante mundial del alquiler turístico para ayudarles.
«He alquilado un Airbnb en Odessa. Valeria me ha dado las gracias y yo le he deseado fuerza y suerte. Airbnb no cobra comisión”
«He alquilado un Airbnb en Odessa. Valeria me ha dado las gracias y yo le he deseado fuerza y suerte. Airbnb no cobra comisión”, explicaba en Twitter Miranda, una de las personas que ha optado por esta vía para ayudar al pueblo ucraniano.
Evidentemente no son tiempos para visitas turísticas a Ucrania y por eso quienes hacen la reserva mandan el mensaje explicando de que no la van a hacer efectiva, sino que solo quieren contribuir para ayudar a una población que no puede recibir salarios y que tiene acceso a lo más básico para sobrevivir.
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«Ahora no tenemos ninguna fuente de ingresos. No podemos pedir a nuestro país que nos ayuden porque todos los recursos del país están destinados a la guerra y a la victoria”, narró a la Radio Pública Nacional de EE.UU. (NPR) Ekaterina Martiusheva, una de las anfitrionas de Kyiv que ha recibido ayuda ciudadana mediante Airbnb.
Ekaterina no es la única que ha compartido sus experiencias. Otros usuarios de la plataforma comentan en las redes cómo se han sumado a la campaña y las respuestas que han recibido de los propietarios de Ucrania.
«Sintiéndome impotente reservé un Airbnb en Kyiv para una estancia esta semana sabiendo que el dinero iría directamente para alguien de allí. No había tarifas de Airbnb. Esta es la hermosa respuesta que recibí. También me dijeron que saben que el mundo les apoya y que todos pueden sentirlo”, tuiteaba otra usuaria junto a un pantallazo de su anfitrión.
«Mi esposo y yo hemos reservado varios alojamientos en todo el país. Los mensajes que hemos podido intercambiar con los que están en Ucrania son desgarradores y aleccionadores»
«Mi esposo y yo hemos reservado varios alojamientos en todo el país. Los mensajes que hemos podido intercambiar con los que están en Ucrania son desgarradores y aleccionadores», explica otra usuaria.
Navegando por Airbnb, es posible reservar una habitación o un apartamento en Kyiv, por ejemplo, a través de Airbnb por 30, 40, 50 o 60 euros la noche. Esta iniciativa ha tenido tal acogida que en poco más de dos días han aumentado las reservas en Ucrania de forma muy significativa.
Tanto es así que el propio CEO de Airbnb, Brian Chesky, ha publicado que, gracias a la ayuda de la gente, se han recaudado cerca de dos millones de dólares. «En 48 horas, se han reservado 61.406 noches en Ucrania», ha matizado. Mientras, la plataforma suspendió su actividad en Rusia.
A través de su fundación Airbnb.org la plataforma albergará gratuitamente a 100,000 refugiados que huyen de Ucrania a países vecinos como Polonia o Rumanía. Los directivos de la compañía enviaron cartas a los gobiernos de Polonia, Alemania, Hungría y Rumanía, entre otros países europeos, para facilitarles «la acogida de refugiados dentro de sus fronteras». Estas estadías, concretamente, serán financiadas por Airbnb, Inc., los donadores del Fondo para refugiados de Airbnb.org y la generosidad de los anfitriones a través de Airbnb.org.
En los últimos cinco años, Airbnb y Airbnb.org han conectado a más de 54,000 refugiados y asilados, incluso de Siria, Venezuela y Afganistán, con viviendas temporales a través de los socios de Airbnb.org.
El año pasado, Airbnb.org anunció la creación de su Fondo para Refugiados y ha movilizado a más de 4,000 donadores para que sigan apoyando su trabajo con refugiados y solicitantes de asilo en todo el mundo. Además de apoyar a los refugiados, la fundación tiene casi una década de experiencia en proporcionar alojamiento de emergencia a quienes lo necesitan.
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En 2020, los Anfitriones de Airbnb de todo el mundo abrieron sus puertas a decenas de miles de trabajadores de primera línea que luchan contra la propagación de covid-19, incluidos profesionales de la salud y trabajadores humanitarios, en asociación con el NHS del Reino Unido, la Cruz Roja Mexicana, y el Estado de Nueva York, la ciudad de Nueva Orleans, el condado de Los Ángeles y organizaciones en Italia y Francia. En el 2021, Airbnb.org también activó su programa de respuesta de emergencia para ayudar a los afectados por las devastadoras inundaciones en Europa Occidental.
Este artículo fue publicado en nuestra edición abril 2022 de Revista Mercado.
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