Google no se queda atrás, de hecho se mantiene trabajando día a día para incrementar la calidad de los servicios provistos a sus usuarios y clientes. Pese a que cada mes surge alguna información que desfavorece a la marca, el esfuerzo por innovar dentro de su mercado, permanece. Una muestra de ello es la nueva actualización que introduce al sistema operativo Fuchsia.
Como ha sido de costumbre también en el sector tecnológico, insertar dispositivos para la creación de un smart home para llevar la vida diaria ligeramente más fácil ha sido la nueva tendencia para las gigantes tecnológicas. La subsidiaria de Alphabet Inc. lanza estos productos bajo el nombre de «Google Home» y recientemente envió una actualización de firmware que cambiaría el sistema operativo de todos los dispositivos Nest.
El primogénito de estos dispositivos para el hogar fue lanzado en 2018, promocionado como un portarretratos digital que, a su vez, funge como asistente virtual; el mismo se lanzó para hacer competencia a otros asistentes caseros como Alexa de Amazon. Hasta la fecha, el sistema operativo era «Cast OS».
Fuchsia intenta ser un sistema con mayor especialización, al mismo tiempo que pretende unificar los sistemas operativos de todos los dispositivos «Google Home» del buscador más usado del mundo. Entre las principales diferencias entre Fuchsia y Cast OS es el hecho que Cast fue creado a base de Linux, mientras que el color rosado brillante ha sido una creación original de Google.
Google busca, con la actualización, una sistematización más elaborada para la inclusión de más dispositivos inteligentes en las casas, lo cual es una buena noticia para la evolución e implementación del ‘internet de las cosas‘ (IoT, por sus siglas en inglés).
Aunque el cambio pueda ser tapado con un dedo, en realidad significa un gran avance para la empresa, pues consolida su compromiso en el desarrollo de hardware y software propios en todos y cada uno de sus dispositivos. En semanas anteriores, Google anunció la nueva generación de sus teléfonos inteligentes: todos cuentan con el chip de procesamiento Tensor, primer chip creado por la empresa.
En la conferencia anual Google I/O, Sundar Pichai, consejero delegado, hizo eco de la mejora de los sistemas de inteligencia artificial para alertar al usuario cuando esté usando lenguaje no inclusivo u ofensivo. En cuanto a su popular servicio de mapas, Google Maps, se anunciaron dos nuevas modalidades: una que sugiere la ruta más segura y que dirige al usuario por las calles en las que se registran menos accidentes y otra que prioriza la ruta más sostenible ecológicamente, es decir, aquella en la que se generarán menos emisiones de dióxido de carbono.
Girando el enfoque hacia el mundo de los teléfonos inteligentes, por primera vez, el primer buscador a nivel mundial equipará a su nuevo modelo de teléfono Pixel 6 con un chip de fabricación propia diseñado específicamente para explotar al máximo las posibilidades de la inteligencia artificial (IA), sobre todo en los campos de la fotografía y el reconocimiento de voz.
La mejora se logra gracias a la implementación de «Tensor», el nuevo chip que tiene la capacidad de usar técnicas de aprendizaje automatizado e IA para pulir el trabajo fotográfico, al igual que ofrecer en milisegundos un resultado mucho más mejorado. (pfm)
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