DOS TITANES COMIENZAN a dar noticia en el campo de lanzamientos espaciales y por suerte para la humanidad se han unido: Richard Branson y Elon Musk, los ahora titulados «señores del espacio». Luego de consagrarse Branson en el espacio con el Virgin Orbit.
Luego de fallar una prueba en mayo del año pasado Virgin Orbit, se ha convertido en la primera compañía de lanzamiento del mundo en enviar un cohete a órbita espacial desde la parte inferior de un ala 747 en el aire. La historia se vuelve a marcar con el despegue del Cosmic Girl, que a las 2:00pm desde Mojave (EEUU) dejó caer a LauncherOne luego de 40 minutos de vuelo.
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Lamentablemente muchos se perdieron de la increíble presentación de este momento, por carecer de una cobertura en vivo al estilo del SpaceX; aunque muchos fanáticos pudieron verlo en un live por Twitter, donde dejaron muchos mensajes de admiración, en su mayoría deseándole lo mejor al multimillonario británico y a su equipo con sede en EE.UU.
Ya a las 2:50pm el equipo de Virgin Orbit anunció con gran orgullo, «¡LauncherOne ha alcanzado la órbita!». Y luego Orbit en varios tuits dejó ver su emoción con mensajes del tipo: «Todos en el equipo que no están bajo el control de la misión en este momento se están volviendo locos». Y otros como: «Incluso la gente de comunicaciones se esfuerza mucho por no parecer demasiado emocionada».
El cliente principal en esta segunda misión del LauncherOne fue la NASA, dentro del marco de su programa de servicios de lanzamientos de carácter empresarial para apoyar a los pequeños desarrolladores de vehículos de lanzamiento emergentes. Esta misión, llamada ELaNa 20 llevaba 10 cubesats de ocho universidades y un centro de la NASA.
Tras el fracaso de la primera misión producida por el fallo en el sistema de encendido del motor NewtonThree del cohete, la NASA no tardó en expresar sus felicitaciones en un Tweet de Thomas Zurbuchen, administrador asociado de la NASA felicitando al equipo de Virgin: “Sé que hoy hay más escalones y quemaduras. Pero, qué logro tan asombroso ya hoy, equipo [Virgin Orbit] «.
En un comentario a Forbes , Peter Beck del rival con sede en Nueva Zelanda Rock Lab también felicitó al equipo de Virgin Orbit, “Alcanzar la órbita esa primera vez es un logro significativo y esperamos que el equipo esté celebrando mucho antes del próximo gran paso para cumplir con regularidad y lanzamientos fiables «.
.@Virgin_Orbit goes into orbit! Congratulations to all the team #LaunchDemo2 #VirginFamily pic.twitter.com/QI8cNrddeG
— Richard Branson (@richardbranson) January 18, 2021
Con este éxito Branson se una al grupo de millonarios que han colocado en órbita algún vehículo espacial, pero con un altísimo costo de más de mil millones de dólares, según el mismo Branson. Una meta conquistada a fuerza de voluntad y en contra de sus asesores que invitaban a desistir del proyecto, luego de la recapitalización que sufrió la aerolínea Virgin Atlantic por causa del covid-19.
Más de 3.000 puestos de trabajo se perdieron en Virgin Atlantic, pero la fe de Branson en el proyecto no mermó lo que lo motivó a seguir adelante con el financiamiento de Virgin Orbit, pese a las fuertes críticas de sus rivales. Uno de ellos, Peter Beck de Rocket Lab aseguró haber gastado mucho menos, provocando que muchos de los inversores se cuestionen si realmente este vehículo espacial puede competir en el mercado con SpaceX, que llevará satélites a granel, y Rocket Lab, que ofrecer un servicio más personalizado.
Sin embargo, Branson planea seguir adelante luego de haber revelado en una entrevista a Forbes, a uno de sus clientes más importantes que será la misma NASA. Mientras las oportunidades para él crecen en Reino Unido (post-Brexit), junto al trabajo de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos y la Fuerza Espacial de los Estados Unidos. Y en el horizonte pinta ya el interés de la empresa privada italiana SITAEL.
