Como bien dice su slogan «República Dominicana lo tiene todo». Con vuelos directos desde las principales ciudades de Latinoamérica, Estados Unidos, Canadá y Europa, es un país que destaca por la calidez de su clima y la hospitalidad de su gente.
Se trata de un país que cuenta con una historia fascinante y con una naturaleza extraordinaria. Así que, sin más preámbulos, estos son los lugares turísticos de República Dominicana que no puedes dejar de visitar:
Punta Cana es uno de los lugares más visitados de la República Dominicana. Se trata de una región ubicada al extremo oriental del país, que es reconocido por sus playas, el paraíso de la fauna y la diversión.
Esta Zona inicia al norte con la Playa Arena Gorda, una playa que orgullosamente posee el certificado de Bandera Azul. A esta le sigue la famosa Playa Bávaro, declarada por la UNESCO como una de las mejores playas del mundo.
Asimismo, la zona de Playa Bávaro ofrece los mejores complejos hoteleros de Punta Cana, así como una amplia oferta de la gastronomía típica del lugar. La bandera dominicana, el asopao y una fresca selección de mariscos y pescados.
Playas, clima tropical, música día y noche y cientos de años de historia fascinante hacen que la capital de la República Dominicana sea un destino inolvidable.
En Santo Domingo, puedes tomar un descanso en las playas de Boca Chica, recorrer algunas de las iglesias más antiguas de América en la zona colonial o comprar ropa de lujo y joyas en la avenida Winston Churchill.
Compra algunas joyas de Larimar, baila y disfruta de los mejores cócteles en Sabina Bar, o, simplemente disfruta de la gastronomía local.
Tanto si quieres tomar el sol, ampliar tus conocimientos históricos, o explorar una enérgica y emocionante metrópolis de América Latina, Santo Domingo es el destino perfecto.
Al ser un área protegida, podrás explorar una zona completamente virgen a la que llegan muy pocos caminos. Este lugar posee una hermosura singular, sin ningún tipo de instalación, se convierte en el entorno perfecto para los que persiguen la aventura y el turismo ecológico.
Aunque acampar está protegido, se pueden realizar otro tipo de actividades como senderismo, montar bicicleta o, simplemente, darse un baño refrescante en una de las aguas meas cristalinas del Caribe.
Desde este lugar, se observa los manatíes la tortuga carey y la iguana verde, junto con numerosas aves como la paloma ceniza o la paloma coronita que viven entre la vegetación endémica formada por canelilla, guanito, guayacán o guayuco, entre otros.
Este lugar turístico de República Dominicana es conocido por la abundante presencia de los preciosos corales que se pueden encontrar en sus aguas limpias, las estrellas de mar y las praderas marinas, por lo que el submarinismo puede convertirse en una experiencia de otro nivel.
Este lugar se conoce también como «el cabo de la prosperidad». Con unos 8 kilómetros de costa, es un balneario que antiguamente era de acceso limitado debido a las explotaciones de bauxita que se realizaban en la zona y que le hicieron próspera por años.
Se trata de un puerto de pescadores, que aún se encuentra mayormente virgen, con una biodiversidad única y envidiable. Al igual que en Bahía de las Águilas, se encuentra una importante reserva de careyes juveniles.
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Las Dunas de Baní ofrecen un paisaje maravilloso, que representa un tesoro nacional de la República Dominicana, gracias a sus altas montañas de arena blanca fina y el sol tan cálido como en pocos lugares del país.
Esta reserva científica responde al nombre original de Monumento Natural Félix Servio Ducoudray, es considerada uno de los espacios naturales más hermosos de la isla.
Desde la cima más alta de las dunas se aprecia de un lado, la hermosa Bahía de Las Salinas y al otro, la hermosa Playa Salinas, de agua muy salada, conocida por sus poderosas olas ideales para practicar windsurf.
El área es de bosque seco subtropical, con una importante flora compuesta por especies nativas como melón espinoso, cactus, uva de playa, saona cimarrona, cayucos, guayacán, guasábara, y otras.
Este Parque Nacional es una de las joyas de los parques nacionales de República Dominicana. Los Haitises que se traduce a «tierra montañosa» en el lenguaje taíno, atrae a múltiples visitantes que son atraídos por sus múltiples formaciones rocosas que se elevan fuera del agua.
El parque también cuenta con exuberantes manglares a lo largo de su bahía, la cual está adornada con cayos que sirven de hogar a múltiples colonias de aves y una serie de cuevas conocidas por tener la mayor cantidad de petroglifos y pictografías del país.
Los Haitises también cuenta con uno de los bosques lluviosos de República Dominicana. Explora el parque en barco desde Samaná, escala su bosque lluvioso para ver la flora de cerca, o ve en kayak a través de su exuberante sistema de manglares.
Se trata de la laguna más grande del país y cuenta con un nivel de agua salada tres veces superior al del mar. Sus más de 10 kilómetros de longitud están rodeados de densos manglares, salpicados por 24 cayos donde podrás observar garzas blancas, reales y azules, playeros occidentales, gaviotas, espátulas rosadas, pelícanos, loros y, hermosos flamencos americanos.
A pocos minutos del centro de la ciudad de Santo Domingo, se encuentra este atractivo natural. Se trata de una formación de miles de años que nació tras un cataclismo que provocó el desplome de gran parte de las rocas de la zona, dividiéndolo en 4 lagos.
La historia del parque muestra indicios de que sus cuevas fueron habitadas por los aborígenes o antecesores taínos.
Los 3 Ojos fueron descubiertos en el año 1916 por tropas nacionales durante la primera intervención estadounidense a República Dominicana, y fue rescatado en 1972, por las autoridades de medio ambiente con el fin de preservar su belleza natural, vegetación, fauna y especies que habitan allí, como: murciélagos, lechuzas, ciguas palmeras, entre otras más.
Bajo la Sierra de Bahoruco se encuentra escondida esta enorme caverna. Sus piscinas color esmeralda y sus dos cámaras conectadas por unas escaleras, resultan emocionantes para los visitantes.
A ella se llega tras caminar treinta minutos a través de un bosque lluvioso lleno de flores locales, incluyendo siete especies de helechos y árboles frutales, todos los cuales están etiquetados y revelan interesantes propiedades medicinales.
Esta península guarda siglos de historia. Los piratas utilizaban sus frondosos bosques de palmeras, playas aisladas y cuevas ocultas como escondites, mientras que las tropas europeas y haitianas se disputaban las profundas aguas de su bahía.
Aunque está conectada por tierra y aire, sigue siendo el paradisíaco y remoto escape de playas salvajes, plantaciones de cocos y selvas tropicales de República Dominicana.
Cada año, 1,500 ballenas jorobadas visitan la Bahía de Samaná para aparearse, dar a luz y disfrutar de este glorioso paisaje tropical.
Además de las excursiones estacionales de avistamiento de ballenas en barco en la pintoresca Bahía de Samaná, hay más aventuras ecoturísticas: bodyboarding y kitesurfing en Las Terrenas; senderismo, observación de aves y espeleología o cuevas en el Parque Nacional Los Haitises; barranquismo o cabalgatas para llegar a la cascada El Limón; y paseos en barco a las magníficas playas de arena blanca, en la base de acantilados de 90 metros, o a la costa de la isla de Cayo Levantado.
Esta ciudad es el centro neurálgico de la provincia de Puerto Plata. En ella está uno de los mayores puertos del país y uno de los aeropuertos internacionales: el aeropuerto internacional Gregorio Luperón.
Una de sus playas más visitadas es la Playa Long Beach, que es la principal de la ciudad, junto con la playa Dorada y la playa Cofresí.
En el centro de la ciudad podrás disfrutar las edificaciones de estilo victoriano que construyeron los ingleses a partir de mediados del siglo XIX. Así mismo, sus sinuosas y estrechas callejuelas y su ambiente marítimo le confieren un encanto especial que deja una huella imborrable a todo el que visita.
Isla Saona tiene apenas uno 1,200 habitantes, que habitan cabañas construidas con hierbas y palmas, ya que está prohibido construir allí y cuya ocupación principal es el turismo y la pesca.
Isla Saona tiene numerosas formaciones rocosas, con bastantes grutas y cavernas en el noreste de su geografía. Posee gran interés histórico gracias a la gran cantidad de reliquias indígenas que se han encontrado allí.
Se pueden hacer excursiones de día para disfrutar de las playas a través de una variedad de opciones que van desde lanchas rápidas hasta catamaranes. Navegar a lo largo del impresionante paisaje de Saona es algo que merece la pena.
La mayoría de las excursiones salen de la playa del pueblo de Bayahíbe. Las excursiones a Saona incluyen una parada en Palmilla, un tramo de arena blanca con una amplia piscina natural, y otra parada en Mano Juan, la única parte poblada de esta isla. La Isla Saona también es el sitio de anidación de tortugas más importante de República Dominicana.
Uno de los tesoros de aventura de Puerto Plata. Las cascadas de los 27 Charcos de Damajagua ofrecen un día completo de senderismo a través de espesos bosques, cruzando puentes y descubriendo la flora dominicana, antes de llegar a la cima rocosa de una colina desde donde comenzará tu recorrido hacia abajo, saltando o deslizándote por una serie de cascadas.
El equipo de seguridad es de uso obligatorio mientras te deslizas por toboganes acolchados por agua, o saltas a profundas piscinas de color turquesa
La mayoría de las excursiones solo ofrecen llevarte a través de siete cascadas, ya que llegar a las 27 está reservado solo para los más aventureros en buena condición física.
Este lago es el resto del antiguo canal marino que unía las bahías de Neiba y Puerto Príncipe. La isla Cabritos es la única que queda dentro del lago en la actualidad y la más importante, siendo uno de los atractivos del parque para el turismo.
Además, cuenta con otros lugares interesantes como La Azufrada, los Borbollones, la bahía Boca de Cachón o la cueva Las Caritas. Entre su fauna se encuentra el cocodrilo americano cuya población en el lago, es una de las mayores del mundo.
No solo es el paso hacia el museo submarino del naufragio del capitán Kidd, sino que también es un lugar perfecto para disfrutar de maravillosas playas paradisíacas de arenas blancas.
Famosa por sus arrecifes de corales. Los interesados del buceo disfrutan de emocionantes sesiones bajo el mar observando la increíble fauna submarina y los restos del barco naufragado del Capitán Kidd, encontrados a sólo dos o tres metros de profundidad en las cercanías de la isla.
Además del barco hundido, los arrecifes forman una extraordinaria pared de coral que provocó innumerables naufragios en la zona y que, ahora, es uno de los más conocidos destinos de los buceadores que visitan el país.
Es un lugar especialmente bueno para la pesca, donde, tradicionalmente, se han obtenido ejemplares de guatapaná, jureles, carites y otros tipos de peces de aguas templadas.
Esta reserva forma parte de la primera Reserva de la Biosfera UNESCO en el país. Los 1,295 kilómetros cuadrados del Parque Nacional Jaragua abarcan diversos ecosistemas, desde el mar a la tierra, lagunas e islas, cuevas taínas, la preciosa y virgen Bahía de Las Águilas y las aisladas islas Beata y Alto Velo.
Podrás ver grandes bandadas de flamencos americanos, palomas coronadas blancas, así como ibis blanca, águilas pescadoras, garzas reales, espátulas rosadas, garzas azules, entre otras.
Las iguanas también llaman este parque su hogar, desde la iguana rinoceronte, que se encuentra en peligro de extinción, hasta la iguana Ricord’s. También verás al solenodonte de la Hispaniola y a la jutía de la Hispaniola.
También conocida como la Isla Bacardí debido a un comercial de Bacardí filmado aquí en la década de 1970, la pequeña y pintoresca isla de Cayo Levantado se encuentra a sólo cinco kilómetros de la Bahía de Samaná, y cuenta con brillante arena blanca y playas bordeadas de palmeras.
Cada día, salen pequeños botes-taxi desde el puerto de Samaná, en la Avenida Marina, que llevan a los visitantes a esta pequeña isla.
Puedes pasar el día nadando, tomando el sol, navegando en kayak o haciendo paddle boarding. Para luego disfrutar de pescado fresco en el lado público de Cayo Levantado.
También se conoce como la ciudad de la eterna primavera, está ubicada en el centro del país a 530m sobre el nivel del mar, en el precioso valle de La Vega. Está rodeada por cuatro grandes ríos: el Yaque del Norte, el Jimenoa, el Guanajuma y el Baignate.
En esta ciudad podrás disfrutar de la tan ansiada paz y tranquilidad en la más hermosa naturaleza. También hay quien dice que no hay lugar más romántico, por el que uno puede perderse en un paseo a caballo por las montañas más altas de Las Antillas.
Altos de Chavón es un modelo de pueblo mediterráneo del siglo XVI que está esculpido completamente en piedra. Este lugar se inauguró en 1982 con la actuación de Frank Sinatra en el anfiteatro al aire libre, de estilo griego, con capacidad para 5,000 personas.
Hoy en día, el pueblo es un lugar agradable para visitar por su encanto medieval, su arquitectura, una plétora de tiendas de puros, ropa y joyería, restaurantes, bares y artesanías. Su pieza central, la Iglesia de San Estanislao, es un lugar popular para celebrar bodas en República Dominicana, con sus inigualables vistas sobre el río.
Además, si eres amante del arte, el Museo Arqueológico Altos de Chavón alberga una de las colecciones meas completas sobre cultura indígena de la República Dominicana.
Desde allí obtienes vistas panorámicas del río Chavón y el campo de golf Dye Fore. De noche los paseos por el lugar se vuelven mágicos, con las plazas de piedra iluminadas y las terrazas para cenar con vistas al río.
Esta construcción gigantesca está dedicada al almirante Colón, y se fraguó desde 1852 cuando el historiador Antonio Delmonte y Tejada había planteado, en una de sus obras, el interés de realizar un monumento en honor a Colón. Sin embargo, la idea no se materializó hasta el siglo XX.
El monumento por un lado representa una cruz, y por el otro, una pirámide maya. Así, se erige un colosal monumento muy original compuesto por 251 faroles y un espacio de 2,6km2. Algunas noches, las luces iluminan el cielo dibujando una gran cruz que se divisa a varios kilómetros de distancia.
En su entrada ondean las banderas de diferentes países que simbolizan la fraternidad entre las naciones. En su interior, puedes recorrer distintas salas que acogen diversas exposiciones permanentes de colecciones de varios países.
Dentro tiene varias salas de conferencia, el Museo Arqueológico, el Museo Ceramiológico e Iconográfico, la biblioteca y la mapoteca. Por supuesto, podrás disfrutar de la atracción principal del monumento, el mausoleo y la capilla de Cristóbal Colón.
También conocido como Parque Nacional del Este, es uno de los parques más repletos de cuevas y aventuras del país, y por esto uno de los más visitados. Posee una gran riqueza en flora y fauna con más de 800 especies diferentes, e incluye tramos de playas blancas en las islas de Catalina y Saona, que cuentan también con una fauna marina impresionante.
Los visitantes pueden hacer senderismo en tierra firme, la cual posee diferentes niveles de dificultad y un montón de cuevas y manantiales. También se puede hacer avistamiento de aves.
En la costa hay varios puntos de buceo y snorkel repletos de arrecifes de coral y paredes submarinas llenas de vida. Y en las arenas de sus costas, se encuentran múltiples nidos de tortugas más importantes del país.
Sitiada en Cabo Engaño, la zona más oriental de República Dominicana, es un lugar naturalmente maravilloso. Posee un complejo deportivo de última generación, además puedes hacer un recorrido en yate, pescar y explorar desde allí los tesoros de la isla.
Tiene una marina de más de 150 amarres, con capacidad para yates de hasta 150 pies, con servicios completos para capitanes y tripulación. Sus costas son consideradas por el Billfish Report como los lugares número 1 del mundo para la pesca y el buceo en aguas profundas.
Este casco antiguo dentro de la capital, fue fundada por Bartolomé Colón en 1496, se construyó casi completamente durante el siglo XVI.
Ubicada en un primer momento al este del río Ozama, fue la primera ciudad levantada por los españoles en el continente americano. Sin embargo, en 1502 pasó a la parte occidental del río bajo las órdenes de Nicolás Ovando, gobernador de La Española por aquellos años, fundando así la nueva Ciudad de Santo Domingo de Guzmán.
En 1990, la UNESCO la declaró patrimonio de la humanidad y hoy día constituye uno de los cascos históricos más emblemáticos del Caribe.
Tiene una gran variedad gastronómica, en diversión para todos los miembros de la familia, para los diurnos y los nocturnos. Este lugar es rico en cultura y convergen gran cantidad de nacionalidades, haciéndolo una zona muy atractiva para los turistas.
Bordeada de cocoteros y palmeros, la playa se encuentra a unos dos kilómetros del pueblo donde encontrarás restaurantes y bares.
Este encantador y pequeño pueblo pesquero se vuelve más tranquilo una vez que los turistas que visitan las islas de Saona y Catalina parten de allí, y la playa se convierte en un pequeño paraíso caribeño.
Es famosa por la pesca y el buceo, además de ser excelente para el snorkel. En las aguas caribeñas de esta playa se pueden observar estrellas de mar, sepias y manta rayas.
Desde aquí se puede visitar el naufragio del capitán Kidd, en la Isla Catalina, o incluirlo en la visita a los museos submarinos, que incluyen otros naufragios por la zona.
En caso de querer quedarte, hay muchos hoteles «all include», otros hospedajes más pequeños y apartahoteles.
También conocido como cayo Paraíso, se encuentra a 25 minutos en lancha del punto de salida que es Punta Rucia, ubicado al noreste de Puerto Plata. Este banco de arena se encuentra en medio de un brillante océano azul, con fina arena blanca y aguas poco profundas repletas de peces tropicales.
Este lugar es ideal para snorkelers de cualquier nivel, o también puedes bucear.
La mayoría de los tour operadores ofrecen viajes ida y vuelta desde Puerto Plata, incluyendo los botes que llevarán al cayo el equipo de snorkel.
Recibe su nombre en honor al primer botánico dominicano que escribió un catálogo de la flora de la isla La Española. Es el más grande del Caribe y ocupa una extensión de 2.000.000m2.
En el lugar se pueden contemplar más de 69.000 especies clasificadas botánicamente, distribuidas en los ocho ecosistemas más importantes del país. Además de los jardines, el espacio alberga los departamentos de Educación Ambiental, Botánica y Horticultura.
Destaca el Reloj Floral, uno de los más grandes del mundo. Cuenta con 20m de diámetro y 3.5 de altura, con agujas de 5m de longitud que señalan las horas. En torno a él se levanta un estanque circular colmado de plantas acuáticas.
Otro de las áreas más concurridas es el Jardín Japonés presenta una preciosa vista paisajística decorada de bambúes, araucanias, sabinas y muchas otras plantas y flores asiáticas. Con añadidos de lagos y puentes «torii», que para los japoneses significa el portal del cielo.
Es un espacio perfecto para relajarse.
Ubicada entre la Playa Punta Popy y la Playa Las Ballenas, posee una gran extensión de arena blanca, que se extiende orgullosa en el centro del pueblo.
En esencia una porción de la misma playa de cinco kilómetros que recibe a los que llegan al pueblo de ensueño de Las Terrenas. Verás canoas de pescadores en algunas partes, al igual que varios bares frente a la playa, hoteles y paseos para aquellos que quieran pasar por la playa sin tocar el agua.
La playa eventualmente se conecta con el Pueblo de Los Pescadores en la parte oeste, y la ancha y favorita para nadar Playa Las Ballenas.
Es un excelente lugar para hacer senderismo de montaña. Valle Nuevo es la joya de la corona de Constanza. Luego de la salida a la cascada de Aguas Blancas, el camino sube hacia la meseta en al cima de una montaña.
Conforme vas subiendo cambia la vegetación por los altos pinos y árboles de ébano verde.
Esta área protegida, conocida como «Madre de las Aguas» o madre de las fuentes de agua, cuenta con múltiples ríos que abastecen al país, con temperaturas que oscilan entre los 14 y 22 grados centígrados. En diciembre, las temperaturas pueden caer bajo cero, con heladas e incluso formación de hielo.
Este lugar es hogar de más de 500 especies de platas, de las cuales 138 son endémicas de Valle Nuevo.
Este paisaje frío y montañoso, remoto y exuberante no se puede ver en ningún otro lugar del país, con una infinidad de oportunidades para acercarse a la naturaleza: caminatas, cabalgatas o paseos en bicicleta alrededor de los pjnos criollos y cerca de los picos cubiertos de niebla.
Punta Cana es el destino meas visitado de República Dominicana. Solo en lo que va del 2022, ha recibido más de 566,235 pasajeros, siendo su aeropuerto el de mayor tráfico. No se trata de un solo destino, ya que está compuesto de varias playas, siendo Bávaro una de las más famosas.
En los polos turísticos reposan las principales instalaciones con finesa recreativos y culturales. Siendo estos las principales zonas de atractivo en la República Dominicana comenzando por:
Aunque Punta Cana sea el lugar más visitado, el primer polo turístico del país es Puerto Plata. También conocida como la novia del atlántico, cuna del prócer de la Restauración de la República, el general Gregorio Luperón, y de su ahijado, el dictador Ulises Hereaux (Lilís).
Puerto Plata cuenta con aproximadamente 17,000 habitaciones y anualmente recibe más de 900,000 turistas, los cuales llegan regularmente por el Aeropuerto Gregorio Luperón.
Por: Karime Rivas.
