Las instituciones conocidas como ‘boarding schools’ o internados han construido prestigio a través de largos años en el sector educativo, promoviéndose como una alternativa distinta para fomentar el espíritu de descubrimiento entre la generación de jóvenes actual y aquellas por venir. Usualmente, este modelo educativo se visualiza en películas como un espacio al cual envías a tus hijos cuando son demasiado rebeldes, sin embargo, ese estereotipo no le hace justicia.
En Suiza se ubican algunos internados excepcionales que han contribuido con la formación académica de miembros de la realeza y personalidades. Sin embargo, muchas cosas cambiaron con el impacto de la pandemia, incluyendo estos únicos modelos de estudio en Suiza, los más distinguidos de todo el mundo.
Situado en los pintorescos alrededores de Rolle, su campus se extiende sobre 28 hectáreas, donde las pensiones y los campos deportivos están rodeados por seculares árboles. Le Rosey es uno de los más sólidos referentes educativos para la élite social global, tras 141 años de su fundación.
«Hoy somos más conscientes de que aprender en un entorno en el cual los alumnos tienen acceso directo a sus profesores y a sus compañeros de clase es importante para el aprendizaje y el bienestar de niños y jóvenes», explica el director general del instituto Christophe Gudin sobre la lección que les brindó el covid-19.
Ahora el internado redefine sus horarios diarios en busca del máximo aprovechamiento de un edificio nuevo capaz de albergar aún más aulas, laboratorios y un espacio de oficinas para verdaderas start-ups locales.
“Para nosotros, la educación debe abarcar el desarrollo deportivo y artístico del alumno, porque estimula su capacidad de trabajar en equipo, de entender al otro, de comunicar. Es la mejor manera de desarrollar todos sus talentos”, afirma Gudin.
En 1910 debutaron con una filosofía estricta que aún forma parte de la esencia de Beau Soleil. Durante los primeros días en el internado, los alumnos emprenden un viaje educativo holístico en el corazón de los Alpes suizos; su ubicación contribuye a brindar un entorno inspirador para todos.
“Las actividades de montaña proporcionan el escenario perfecto para el desafío, y el carácter desarrollado se traduce en un mejor rendimiento en el aula y en todos los aspectos en la vida de los estudiantes”, explica la directora de Marketing del colegio, Kirsty Arnison.
Como parte de la historia de Beau Soleil, a lo largo del año escolar se realizan siete desafíos; la finalidad es que cada alumno haga su mejor esfuerzo, superando sus propios límites y si así lo desean, ganar el Challenge Championship.
«Los líderes del futuro que estamos formando habrán experimentado y superado retos académicos, sociales, físicos, mentales, y habrán aprendido a confiar en los demás”, afirma Arnison. (pfm)
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