Living Carbon recauda US$ 15 millones para sembrar árboles biológicamente alterados

Por Karime Rivas | febrero 28, 2022

Sí, los árboles nos han estado cuidando por millones de años, pero la verdad es que son relativamente ineficientes para capturar el carbono. Al respecto, Living Carbon ha dado un gran paso para cambiar eso. La compañía ha desarrollado una forma de mejorar el proceso de fotosíntesis para que las hojas y sus tallos leñosos puedan alcanzar el ritmo de las emisiones creadas por humanos.

Si lo hace, estamos hablando de un sistema que no solo puede ayudar a capturar más dióxido de carbono de la atmósfera, sino que también podrá almacenarlo por períodos más largos. Ambos se consideran elementos esenciales en la carrera mundial para reducir las emisiones en las próximas décadas.

La compañía también anunció una asociación de cuatro años con la Universidad Estatal de Oregon para probar sus árboles en el campo, así como 15 millones de dólares en nuevos fondos de inversionistas. Esto convirtió a Living Carbon en una de las Startups a observar por The Business Times en 2022.

«Nuestro objetivo es reducir el 2% de las emisiones globales para 2050 usando aproximadamente 13 millones de acres de tierra», dijo la directora ejecutiva Maddie Hall en un comunicado. «La investigación de hoy es solo el primer paso para demostrar cómo potenciar la ecología, a través del uso responsable de la biotecnología en los árboles puede ser una solución escalable y viable a la crisis climática».

Híbridos potenciados

La empresa utiliza biología sintética para insertar genes de una planta en otra para crea un árbol híbrido, y trabajará con la Facultad de silvicultura del estado de Oregón para monitorearlos en una prueba de campo.

Hasta la fecha han plantado más de 670 árboles en Corvallis, Oregon, donde estudiantes y profesores monitorearán su progreso. Alrededor de dos tercios de los árboles en este estudio de campo han presentado fotosíntesis mejorada, y los mejores resultados han sido con los árboles jóvenes de álamo y pino Loblolly.

Hall fundó la compañía en 2019 para abordar el cambio climático y convertirse en un «centro climático biotecnológico». Más allá de la fotosíntesis, la compañía también dijo en su blog oficial que ha desarrollado una forma de permitir que los árboles aumenten la cantidad de metales pesados absorbidos por sus raíces, al mismo tiempo que ralentizan la descomposición y eliminan los metales tóxicos del suelo.

«Nuestras plantas son únicas en su capacidad de crecer en terrenos con una alta concentración de níquel y cobre, como sitios mineros abandonados y en recuperación. Ya contamos con una tubería de más de 3,000 acres de terrenos mineros abandonados para atraer inversiones a antiguas comunidades mineras y regenerar terrenos que es demasiado tóxico para optras plantas», dice la publicación del blog. (KR)