¿Quién fue Ouka Leele, la «pintora de fotografías» madrileña?

Por Karime Rivas | mayo 26, 2022

Bárbara Allende Gil de Biedma, una reconocida fotógrafa madrileña mejor conocida como Ouka Leele, tomó su nombre artístico de una estrella inventada, un seudónimo prestado, a finales de los años setenta, del cómic Europa Requiem, de El Hortelano, uno de sus compañeros de fatigas de lo que se conoce como La Movida madrileña.

Obra maestra de Ouka Leele
Fotografía: El Confidencial

Dibujante innata, Ouka abandonó la carrera de Bellas Artes para ingresar en 1975 en la escuela de fotografía Photocentro, donde se publicaron sus primeras imágenes en un volumen inaugural que, bajo el título Principio: nueve jóvenes fotógrafos españoles (1976), pretendía promover la fotografía «como fenómeno cultural artístico».

Su última exposición fue presentada hace apenas un año, en el círculo de Bellas Artes, dentro del festival PhotoEspaña, una muestra con abundante material inédito que se centró en sus inicios, con material procedente del Archivo Lafuente, que atesora unas 1,200 piezas de la artista, entre documentación y obras.

A blanco y negro

Leele fotografiaba habitualmente en blanco y negro, odiaba las fotos a color, y al serle encargada una fotografía en color para una portada, decidió inventar ella misma el color de la imagen. Su propuesta es innovadora al construir sus propios colores.

Ouka Leele en un autorretrato
Fotografía: Radio Praga

Comenzó a colorear sus instantáneas, aunando su vocación de pintora con la fotografía. Entre sus trabajos destacados está la participación en la Bienal de Arte Contemporáneo de Sao Paulo (Brasil) y su primera exposición retrospectiva en el Museo Español de Arte Contemporáneo (Madrid), ambas en 1987.

Lo meas destacable es que en la obra de Ouka Leele no hay fotomontajes: lo que aparece en la fotografía se prepara antes de la instantánea, en lo que, para la autora era el momento más interesante de la creación, por el hecho de crear un mundo irreal.

Su legado se extiende desde sus primera obras donde combinaba elementos pop y neodadaístas con una gama de colores ácidos e intensos; posteriormente  evolucionó hacia composiciones más ricas, basadas en la tradición barroca y en la utilización de colores más calmados, para volver con colores eléctricos a finales de la década de 1990.

La fotógrafa y pintora ha fallecido este martes en el hospital Ruber de Madrid a los 64 años, según han informado a EFE fuentes de la familia de la artista.

Por: KR / EFE.