¿Cuándo fue la última vez que recibiste comentarios que te ayudaron a crecer en tu carrera? Si eres mujer, puede ser incluso menos frecuente que tus compañeros de trabajo hombres.
Una investigación publicada por el Harvard Business Review, demuestra que las mujeres tienen un 20% menos de probabilidades de recibir comentarios procesables que pueden contribuir a su rendimiento y crecimiento en el trabajo. Los gerentes a menudo dudan para dar a las mujeres comentarios negativos debido a preocupaciones sobre cómo responderán. Más específicamente, temen que sus comentarios se interpreten como «malvados o hirientes». Estas hipótesis, basadas en gran medida en estereotipos de género puede tener repercusión directa en la carrera de las mujeres.
Sin una orientación clara de sus gerentes, las mujeres a menudo tienen que esforzarse más para entender cómo cumplir y superar las expectativas de sus funciones.
No pidas comentarios aleatorios a tu jefe, como cuando te encuentras con ellos en el pasillo. Eso no te va a dar los resultados que estás buscando. La retroalimentación debe ser una conversación continua bidireccional que se lleva a cabo en un entorno de reflexivo y ocurre con más frecuencia que las revisiones anuales de rendimiento.
Puedes hacer preguntas puntuales del tipo, «¿Cuándo es el momento en que me viste en mi mejor rendimiento laboral?»,o, «¿Qué debo hacer o pensar para mejorar en este período?». También puedes solicitar comentarios en los puntos de inflexión de tu trabajo, como cuando te han asignado una nueva tarea o proyecto o te han elegido para dirigir una iniciativa o comité.
¿De dónde vas a recibir los comentarios? Si simplemente dijiste, «mi jefe», entonces no vas a tener la imagen completa. Tu gerente no es la única persona con la que trabajas, así que no te limites a ellos.
Considera otras personas con credibilidad que puedan proporcionarte información útil sobre tu desempeño. Por ejemplo, piensa en los gerentes que lideran equipos con los que interactúas frecuentemente, mentores o patrocinadores que están familiarizados con tu trabajo, el jefe de tu jefe y, posiblemente, incluso en compañeros de confianza.
De este modo obtendrás una perspectiva global sobre cómo te presentas en el trabajo y lo que otros valoran de tu cuanto más preguntes. Especialmente si esperas convertirte en líder en otra parte de la organización algún día.
Algunas de las preguntas que les puedes formular son las siguientes:
¿Cuáles son mis puntos fuertes o las cosas que hago bien? A menudo se considera que la retroalimentación es algo negativo. Pero no pases por alto los comentarios positivos: te indica lo que estás haciendo bien y deberías seguir haciendo. Ser reconocida por tus fortalezas también puede ayudarte a estar motivada y dar lugar a una interacción positiva con tu manager o compañeros.
¿Cómo se alinean mis fortalezas con los objetivos de la organización? Las investigaciones muestran que si en la revisión del desempeño de la mujer, ella no está directamente relacionada con los resultados empresariales y los logros profesionales, puede ser privada de un ascenso.
Para avanzar, querrás asegurarte de que tus proyectos de trabajo se ajusten a los objetivos de tu empresa. Incluso si aún no está en condiciones de dirigir un proyecto, puede ser útil saber qué papel desempeñan sus contribuciones en el logro de los objetivos empresariales más grandes.
¿En qué áreas debo centrarme más? Preguntarle a su gerente sobre las áreas en las que debe centrarse le dará la oportunidad de hablar sobre las cosas que puede hacer para mejorar y cualquier habilidad adicional que necesite desarrollar. Puede que estén tentados a hablar solo de sus fortalezas, pero esto no será suficiente para llevarte al siguiente nivel de tu carrera.
Me gustaría trabajar para alcanzar el (papel específico en la organización al que aspira). ¿Cuáles son algunas cosas que debo trabajar, aprender y mejorar para llegar allí? Después de haber estado en su empresa durante un tiempo, puede identificar un rol al que aspira. No tengas miedo de pedir información sobre cómo lograr este objetivo. Demuestra que estás pensando en el futuro acerca de tu carrera.
Como mujer es muy probable que debas ser la defensora de tu propia carrera. Es un hecho triste pero a menudo cierto que si no pides los comentarios que necesitas para crecer, no lo recibirás. Si te posicionas para lograr tus aspiraciones de liderazgo y carrera, tal vez solo seas la jefe algún día y puedas cambiar la narrativa. (KR)
