Al empoderar a una niña, ayudas a todo un país. Con esta convicción, Fundación Tropicalia puso en el escenario una iniciativa encabezada por Adriana Cisneros. Ella, junto a su equipo, asumió el compromiso de acompañar el sano desarrollo de las niñas de Miches desde hace 10 años, a través de su iniciativa Soy niña, soy importante.
A la fecha ha conseguido transformar las vidas de más de 1,200 niñas. Esta iniciativa comenzó en el año 2012 con un campamento de verano y actualmente implementa también un programa en casa y lidera campañas de concienciación y activismo en República Dominicana, con un enfoque geográfico en el municipio de Miches.
Con una visión compartida, Grupo Bentrani se une en esta ocasión para generar conciencia sobre la situación de desigualdad que siguen viviendo miles de niñas dominicanas.
En sus palabras, Katherine Durán, directora de Soy niña, soy importante, manifestó: «Gracias a Grupo Bentrani por acompañarnos a visibilizar las condiciones en la que se encuentra la niña dominicana. Como Fundación, tenemos un enfoque integral para crear un efecto transformador en nuestras chicas y su comunidad. Priorizamos su educación como eje fundamental para catapultar todo su potencial y permitirles descubrir un modelo de vida distinto».
Por años la Fundación se ha dedicado a crear un ecosistema envolvente para Miches. A través del diseño de implementación de proyectos innovadores de alto impacto, en cuatro áreas principales: medioambiente, educación, productividad, y apoyo sociocultural; esta última con el objetivo de promover el desarrollo integral de los habitantes, los valores culturales y la igualdad de género.
El proyecto insignia es el campamento de verano de Soy niña, soy importante. Un proyecto a través del cual se ofrece a las niñas un espacio seguro de contención, aprendizaje y diversión en el que simplemente puedan ser niñas.
Las actividades son recreativas y contienen mensajes transformadores que invitan a las niñas a confiar en ellas mismas, empoderarse de sus habilidades, desarrollar un plan de vida y tomar decisiones acordes con su edad.
La CEO de la Fundación Tropicalia, Adriana Cisneros, es también la CEO de la Organización Cisneros, así como Presidente de la Fundación Cisneros. En sus manos, reposa la responsabilidad de continuar con el legado de su abuelo y su padre, liderando frente a una modernidad retadora y un mundo cada vez más globalizado.
¡Feliz Día Internacional de la Mujer! ¡Hoy celebramos las niñas y las mujeres de todo el mundo! Este año se cumplen 10 años de Soy niña, soy importante de @fundtropicalia, una iniciativa dirigida a niñas de 9 a 15 años que viven en condiciones vulnerables en Miches. pic.twitter.com/NIxnQxj3ju
— Tropicalia (@TropicaliaRD) March 8, 2022
Adriana Cisneros siempre ha estado inmersa en el mundo de los medios de comunicación y sabe utilizar a su favor el poder de las nuevas tecnologías y las herramientas para acercar a las personas.
Uno de los mayores legados familiares de los Cisneros es la importancia de la responsabilidad social empresarial, y una de las mejores formas de llevarla a cabo ha sido promoviendo el debate, la visión crítica y proactiva sobre lo que sucede a nuestro alrededor, así como impulsando el liderazgo y la participación activa de los jóvenes en el desarrollo de la región.
De allí su impacto en República Dominicana, una tierra donde se ha proyectado su deseo de llevar a cabo causas sociales, que mejoren la calidad de vida de los más jóvenes.
Por: Karime Rivas.
