Países miembros de la OCDE aprueban el impuesto mínimo global

Por pferreras | julio 1, 2021

Furor es lo que ha causado la decisión histórica durante la cumbre del G7 sobre el impuesto mínimo global de hasta un 15% a grandes empresas. Los responsables económico del Reino Unido, Estados Unidos, Francia, Alemania, Italia, Canadá y Japón apoyaron la reforma del sistema fiscal global, tras casi diez años de intentos.

Cabe destacar que el pacto no es efectivo hasta ser aprobado en la reunión del G20 –países desarrollados y emergentes– en Venecia a principios de este mes.

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) fue designada para diseñar el impuesto para así lograr una mejor repartición de los ingresos fiscales provenientes de las multinacionales, pues la entidad tiene como misión principal diseñar políticas capaces de promover igualdad y bienestar general.

Hoy, un total de 130 países lograron definir dos «pilares» para hacer efectivo este pago: un mecanismo estándar de gravámenes y un dispositivo para la distribución del dinero obtenido. Mathias Cormann, secretario general de la OCDE, recalcó que esta medida pretende ser un límite para la competencia fiscal entre países.

«Este paquete histórico de medidas garantizará que las grandes empresas multinacionales pagan su justa contribución en impuestos en todo el mundo», dijo Cormann.

El ministro francés de Finanzas, Bruno Le Maire, explicó que su país espera recibir, gracias a los dos pilares, entre 5,000 y 10,000 millones de euros cada año.

Le Maire hizo hincapié en que el compromiso es una solución pragmática que permitirá que, sin excepción, todos los grandes grupos digitales queden cubiertos por el nuevo dispositivo fiscal de forma que todos van a pagar «su justa contribución» allí donde tienen negocio.

Al pacto todavía no se une Perú, Estonia, Hungría, Barbados, Irlanda, Kenia, Nigeria, Sri Lanka, San Vicente y las Granadinas.

Impuesto generaría alrededor de US$ 150,000 millones

Se estima que en un momento de crisis económica asociada a la pandemia de covid-19, un sistema impositivo con menos beneficios para las multinacionales permitiría que los gobiernos aumenten su recaudación fiscal.

Según datos de Pascal Saint-Amans, director del Centro de Política y Administración Tributaria de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), el impuesto mínimo global de un 15% podría generar alrededor de US$150.000 millones en ingresos adicionales para gobiernos de todo el mundo.

«De alguna manera, este es el final del trabajo sobre una regulación de la globalización para una mayor justicia tributaria», explica Saint-Amans.

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