La pandemia del covid-19 ha generado miedo e incertidumbre, y encendido las alarmas en todos los aspectos de la vida cotidiana, incluyendo la fertilidad y el embarazo que, teniendo en consideración las medidas generales de prevención, el llamado es a planificarlo con tranquilidad y seguridad.
La OMS afirma que las embarazadas pacientes de covid-19 tienen menos probabilidades de presentar síntomas, sin embargo, tienen mayor susceptibilidad a requerir de cuidados intensivos en caso de alcanzar la gravedad de la enfermedad.
Considerando que la incidencia de la covid-19 desde su aparición a finales del 2019, ha trastornado la vida de la humanidad en todos los aspectos, suponiendo una amenaza latente para el bienestar físico y emocional, temas como la fertilidad, la concepción y el embarazo han sido una de las inquietantes particularmente preocupantes.
A finales del 2020, expertos de la Universidad de Birmingham (Reino Unido), la Organización Mundial de la Salud y el Programa Especial HRP y otros colaboradores, compilaron y sintetizaron datos sobre la situación de las embarazadas con covid-19 en países de todo el mundo a través de una investigación publicada en la revista médica especializada BMJ.
Dicha investigación arrojó que las embarazadas con covid-19, que presentan condiciones de salud preexistentes, como diabetes o hipertensión crónica, al igual que las personas de mayor edad o con sobrepeso, tienen mayores probabilidades de experimentar complicaciones graves y probabilidades de dar a luz prematuramente. De manera adicional, podrían exponerse a mayores niveles de estrés y ansiedad.
En otro orden, especialistas de la salud reproductiva de la mujer sostienen que los cambios fisiológicos del embarazo aumentan las probabilidades de las enfermedades respiratorias, significando además que los cambios en la función cardíaca, la función pulmonar, y en el sistema inmune, hacen a las mujeres en estado de gestación más propensas a infecciones.
Desde otra perspectiva, señalan que algunos síntomas fisiológicos del embarazo como dificultad para respirar, pueden ser similares a los de la covid-19, por tanto se podrían generar confusiones, por lo que recomiendan que al presentar dificultades para respirar en adición a otros síntomas como dolor o presión en el pecho y sensación de desorientación, es necesario recurrir a atención médica de manera inmediata.
Una preocupación significativa, es el posible contagio de la madre al feto, de lo que no existe aún evidencia. Sin embargo, el parto prematuro ha sido asociado al padecimiento de covid-19, así otras condiciones como restricción del crecimiento intrauterino (RCIU), y en menor porcentaje los abortos espontáneos. La confirmación de esas asociaciones se encuentran en fase de investigación.
Por supuesto, continuar la vida hoy día y cualquier decisión a tomar, debe ir asociada a las medidas de protección y prevención necesarias para evitar la propagación y contagio de covid-19, en estos momentos la vacunación es una de las más importantes. Y aunque las mujeres embarazadas, están incluidas entre la población vulnerable con alto riesgo de contagio, la Organización Mundial de la Salud (OMS), no recomienda en este momento la vacunación de las mujeres embarazadas.
Tales indicaciones no están basadas en algún riesgo o amenaza comprobadas de la vacunación para embarazadas y lactantes, son medidas preventivas porque aún no se han realizado investigaciones al respecto. Los expertos consideran esas medidas como normales, significando que las mujeres embarazadas son regularmente excluidas de los primeros ensayos clínicos en todo tipo de investigaciones para nuevos medicamentos y vacunas.
