Probióticos, el plus del sistema inmune

Por revistamercado | abril 29, 2021

Cada día es más común oír la frase «eres lo que comes» y en realidad no hay nada más cierto. El impacto de los hábitos alimenticios sobre la salud es incuestionable, por eso los probióticos han cobrado relevancia.

En los últimos tiempos, también ha despertado el interés de grupos de investigación y profesionales de la salud por los beneficios potenciales que resultan de su ingesta, incluyendo el fortalecimiento del sistema inmunitario.

Los probióticos, por definición, son microorganismos vivos que permanecen activos en el intestino, alterando su microbiota. Su función principal es la de regular el funcionamiento gastrointestinal, mejorando la inmunidad intestinal.

El sistema inmune y los probióticos

Entonces surge la pregunta: ¿Cómo se relaciona el intestino con el sistema inmunitario y por qué se afirma que los probióticos pueden ayudar a reforzarlo? La respuesta es sencilla: El 80 % del sistema inmunitario está en el intestino: la flora intestinal ayuda a fortalecerlo y luchar contra infecciones comunes.

Pero, la flora puede desequilibrarse fácilmente y afectar a nuestras defensas; es allí cuando los probióticos entran a jugar un papel importante. Consumirlos favorece los procesos biológicos y bioquímicos del intestino que, a su vez, fortalecen el sistema inmunitario.

En pocas palabras una barrera intestinal fuerte es clave para tener un sistema inmune fuerte, capaz de neutralizar procesos infecciosos y mantener en óptimo estado la salud.

Los probióticos no son más que bacterias beneficiosas y su impacto positivo sobre la flora intestinal puede ayudar a mejorar nuestra función inmunitaria, digestiva y respiratoria y nuestra salud en general.

Aunque pueden encontrarse en farmacias como un complemento que se toma cuando hay problemas digestivos, lo ideal es ingerir alimentos en la dieta diaria que los incluyan.

Beneficios

  • Mantienen el equilibrio para favorecer procesos biológicos del intestino. Colaboran en la formación de nutrientes esenciales como las vitaminas, las enzimas y ácidos grasos, al igual que favorecen la absorción de calcio, hierro y magnesio.
  • Favorecen la digestión y reducen la diarrea que altera la flora intestinal, restaurando los microorganismos del intestino.
  • Ayudan a la resistencia contra infecciones, desplazando microorganismos nocivos para la salud, prohibiendo su proliferación. Además, inhiben toxinas bacterianas, produciendo sustancias antimicrobianas contra otros microorganismos no deseados.